Creo en ti, y en tus frágiles maneras
En tu pudor y en las miradas discretas
Creo en tu silencio, que otorga lo que callas
Y en las lágrimas amargas, que sin duda
Me corresponden en gran medida
Y creo en tus manos cubriendo tu rostro
Tapando las ventanas que son tus ojos
Porque sabes que puedo ver a través
Y leerte…
Y creo en tus modales
Y tu dulce ingenuidad
Y me gusta recordar tu ropa
De la cual nunca pude ver
Más que aquello que se suponía…
Y recuerdo claramente
Como te cubrías el escote al agacharte
Ridícula remembranza
Pero cabe en este país de placeras
Y sufro tu recuerdo…
Y creo y recuerdo tus labios
Y esos besos que sabían a manjar
y tus maneras señoriales
Tan discordes con la realidad actual
Y sé que seguiré recordándote
Y creyendo en ti infinitamente
Porque es imposible no comparar
A cuanta zorra se me cruce en el camino
Con tu altivez y sobriedad
Con tu recato y buenas maneras… en fin
Con tu sinceridad.