El día de mañana, o cualquiera,
los liberales izquierdocitos aprobarán una ley, que obligue a la gente a
proclamar que el cielo es de color verde. Por fuerza de la ley, estarás
obligado a gritar esta “verdad” a los cuatro vientos… y sin embargo, en tu corazón, sabes que todo
es una mentira. Todo es falso, pero no te atreves a decirlo, porque te
enseñaron que un buen ciudadano es “respetuoso de la ley”. Qué pena que no te
hayan enseñado a evaluar moralmente una ley… al menos como para no generar
conflictos psicológicos.
Pocas personas entienden la
relación entre las mentiras políticas y sanidad. El primer paso para mejorar en
salud, es dejar de mentir… y mentirse políticamente.